Hola a todos ahora actualizare mi novela, si es que alguien la lee....

Capitulo 10

Entramos a la casa, Edward hablaba por celular con alguien.

-¿Quién es?- pregunté acercándome rápidamente a Rosalie.

-Es Alice, ha tenido una visión de los Vulturis, Aro, Jane y Alec vendrán aquí,  en un par de semanas, ¿qué vamos a hacer?- respondió Rosalie, intentando ocultar su temor.

-¡Pelear!-, dijo Renesmee, es nuestra oportunidad de librarnos para siempre de esa basura italiana, como decían, Vladimir y Stefan, ¿verdad?, así me contaron ustedes.

-No es tan sencillo Renesmee, porqué esta vez, no vienen por ti, vienen por Jacob.

Narrado por Renesmee

Sentí que mi respiración se cortaba, la posibilidad de que algo o alguien dañara a mi Jacob solo tenía cabida en la más horrenda de mis pesadillas, jamás en la vida real, mi corazón parecía estar siendo clavado por millones de ajugas de solo pensar en el peligro que correría mi hombre lobo.

-De igual modo, tenemos que enfrentarlos- les dije con mi rostro lleno de incertidumbre ante sus reacciones.

Mire cada una de las caras que se encontraban en la habitación, y todas estaban petrificadas, como si no supieran que hacer.

De pronto mi padre, hizo un comentario, que viniendo de él me sorprendió muchísimo, “la verdad no es asunto nuestro, nosotros ya no vivimos en este territorio, la manada tendrá que encargarse de los Vulturis, si estos se atreven a entran en sus tierras, nosotros volveremos a casa.”

Debe ser una broma, ¿verdad?, papá no puedes estar hablando enserio, le dije sorprendida.

-La verdad es que no estoy bromeando, después de lo que fue capaz de hacer, estando casado, deberían darle una lección, pero no te preocupes, el no está solo, tiene a la manada- agregó con tranquilidad.

-Lo estas juzgando por haber estado conmigo, se te olvida que él fue una de las primeras personas que nos apoyo, cuando mi madre estaba embarazada y la manada quería asesinarla,  el que te ayudo en tu asqueroso plan para separarnos, que a pesar de todo siempre estuvo hay para mí- le grité y mis ojos se llenaban de lagrimas.

-Ahora tu quieres darle vuelta la espalda, no, no creo que tú seas capaz de algo así, papá, y menos por algo que no te concierne, ¿qué demonios te interesa si yo me acosté con él o no?-

-Tú sabes que él se aprovecho, que tú estabas vulnerable, por todo lo que estaba sucediendo- me dijo mirándome con lastima-

-Por Dios papá, ya no soy una niña, sabes algo, yo lo busqué, yo le pedí que me hiciera suya, yo quise hacer el amor con él, es más el me pidió que nos detuviéramos, pero yo no quería, sabes por qué, porque lo amo, más que mi vida, me arrepiento de que no haya sucedido antes  y nunca, escúchame bien papá, nunca me separaras de él- di media vuelta y abrí  nuevamente la puerta para ir en busca de Jacob.

Renesmee oí decir a mi madre, ¿dónde vas?

Voy a advertirle a Jacob, lo que sucede, tenemos que ver que haremos.

¡Ah! Por cierto padre, por si no te quedó lo suficientemente claro, no me iré a ningún lado, ni contigo, ni con mamá, ni con nadie, porque prefiero morir con él, que vivir sin él.

-Te convertirás en su amante, perfecto- gritó mi padre-

-¿Qué?, pero qué demonios te sucede, pareciera que no me conoces, yo jamás sería capaz de hacer algo así, de verdad que te desconozco papá-

-Pues yo digo lo mismo- me dijo mi padre, sus palabras dolieron más de lo que yo esperaba, porque a pesar de mi rabia, y todas las emociones que tenía en mi interior, mi padre era una de las personas más importantes en mi vida, y que se comportara de esa forma, me rompió el corazón.

-Una última cosa hija, o debo llamarte Nessie, dijo de forma sarcástica, no te olvides que Jacob,  peleo para proteger a tu madre, no por ti, el estaba enamorado de ella, es mas antes de imprimarse de ti, quería asesinarte, ya que para el eras una asesina, ahora una estúpida lógica genética le dice que tu eres la indicada, no lo olvides, ahora puedes irte, pero si sales por esa puerta,  no vuelvas- las palabras de mi padre, cavaron en lo más profundo de mi ser, hasta que punto pretendía llegar, para protegerme, acaso le daba igual herirme.

-¡Edward!, ¿estás demente?, como puedes hablarle así a nuestra hija. Escuche apenas a mi madre, mi cabeza comenzó a dar vueltas, y de pronto no pude mantenerme en pie, sentí la fría piel de mi tía Rose, ella era el único apoyo, por el cual no me desplomaba.

-Tía sácame de aquí-, le suplique con un hilo de voz.

Las voces de mis padres, desaparecieron al alejarnos, no sé si me desmaye, o me dormí o solo estaba inconsciente, solo sé que al despertar tuve un dejavú, o un sueño, quién demonios sabía.

¡Jacob! ¿Qué haces aquí?, estoy soñando ¿verdad?

Me di cuenta que no, cuando mi ti Rose, entro en el dormitorio.

-¿Cómo llegue aquí?, ¿Seth sabe que volví?- pregunté un poco alterada, me quite la ropa de cama, para ponerme de pie, sin embargo, no pude, todo me dio vueltas.

Tía Rose se acercó a mí y me obligo a recostarme nuevamente.

-No seas necia, Renesmee, necesitas descansar, has estado bajo mucho stress- me dijo Jacob, mirándome con esos ojos que me vuelven loca.

-Seth está en la cocina preparándote algo de comer, no creo que tengas fuerzas para ir de caza, aunque creo que lo necesitarías.-agregó Jake.

-Y, ¿por qué te importa tanto Seth?- pregunto poniéndose serio.

-No es obvio, está es su cabaña, debe saberlo, además… espera un momento, Jacob Black, ¿estás celoso?- le dije levantando una ceja y esbozando una sonrisa.

- Jake miró a Rosalie, se acomodó en la silla, y sus mejillas se sonrojaron, aclaro la garganta, y protestó, -estas muy cansada todavía, porque no sabes lo que hablas.

-Si como no,- le dije, sonriendo, me encanta cuando me cela.

-Ya está bien, ¿no?, dijo tía Rose, haciéndome un gesto de desaprobación con esa situación.

La miré haciendo un puchero y ella captó de inmediato mi petición.

-Puso los ojos blancos y me dijo, -está bien, pero solo unos minutos, y dio media vuelta para salir del cuarto.

Miró a Jacob, advirtiéndole, -no te pases de listo-.

Jake me miró fijamente, -no vuelvas a hacer eso delante de Rosalie- me advirtió.

-¿Qué cosa?, ¿ponerte en evidencia?, por favor si tu solo lo haces bien, eres demasiado evidente- dije mientras acomodaba la almohada.

-Creo que será mejor que me valla- me dijo poniéndose de pie.

El solo oírlo decir eso, me quebrajo por dentro.

¡No, no lo hagas por favor! ¡Te necesito!, mis labios pronunciaron esas palabras, influenciadas por  mi corazón, porque mi conciencia sabía que no debía hacerlo.

Jacob cerró los ojos, se llevo una mano a la cabeza, revolviéndose el pelo, -está bien- me respondió.

Antes de que pudiera tomar asiento, le hice una seña, para que se acercara, quería estar cerca de él.

Lo dudo por un instante, pero finalmente, se acercó y sentó a mi lado, intento mostrarse distante, pero no lo logró, yo pude sentir cuando los latidos de su corazón se aceleraron.

Me acurruqué junto a él, puse mi cabeza sobre sus piernas, y el comenzó a acariciar mi pelo, sus caricias eran placenteras.

-Nessie, ¿Qué voy a hacer contigo?- le oí decir.

-Lo que debiste hacer desde un principio, mantenerme a tu lado- le respondí.

-Nessi, sabes que no puedo hacer eso, ¿Qué sucederá con Vannesa?

-Lo sé, pero no perdía nada con intentarlo- murmuré apenada.

Me levanté, y me acomodé para quedar frente a él, tomé su rostro con mis manos, sentí que mi corazón estallaría, el me miró a los ojos, y me suplicó con la mirada, para que no lo hiciera, cerré mis ojos y me acerqué tanto a sus labios, que sentí que su aliento quemaba los míos, el tomo mis manos con las suyas, se alejo un poco, agacho la cabeza y me susurro,

-No seas cruel, tú sabes cuánto te amo, y sabes que no podemos…- dijo con un hilo delgado de voz, levante su rostro con mi mano y para mi sorpresa, las lágrimas comenzaban a aflorar en sus hermosos ojos.

-¡No, Jacob!, por favor no llores, ¡lo siento mucho!, no debí hacer esto-, exclamé, apartándome de su lado y bajando de la cama. No sabía cómo actuar, mi cuerpo, mi alma y corazón, deseaban con todas sus fuerzas, a ese hombre que estaba en la habitación, pero mi mente y mi conciencia no me lo permitían.

¡Soy una estúpida!, repetía en mi cabeza, una y otra vez, mientras caminaba sin sentido en el dormitorio, entré en el baño, y me quedé quieta unos instantes frente al espejo, y fue en ese momento cuando me di cuenta que debía renunciar a él, cuando lo repetí en mi mente, un dolor en el pecho me hizo perder el equilibrio, pero no podía permitirme ser débil, debía ser fuerte por él, a veces hay que hacer sacrificios, está claro que los Vulturis quieren dañar a Jacob, por mi causa, ya que él representa un peligro, para mantenerme oculta, lo amo tanto, que no me perdonaría que algo le sucediera, se que tal vez no será cien por ciento feliz, pero al menos seguirá con vida, con la vida que llevaba antes de que yo regresara,  no le pediré que pelee, porque no es justo, que una vez más tenga que arriesgar su vida, además aquí hay una persona involucrada que no tiene nada que ver con esta historia, por lo tanto, no hay vuelta que darle, la decisión está tomada. Sequé las lágrimas de mis ojos, y di inicio a algo que jamás pensé hacer.

¡Tía Rose!, comencé a gritar, apenas abrí la puerta del baño, Jake me miró sorprendido, yo no fui capaz de de mirarlo a los ojos,  el no comprendía que sucedía.

-¿Qué sucede Nessie?- me pregunto acercándose.

-¡No te me acerques!- le grité, aunque mi voz no sonó muy segura.

-¡Tía Rose!- volví a gritar.

-¿De qué me perdí?, hace un instante, trataste de besarme y ahora no quieres que me acerque- dijo ya un poco alterado y haciendo gestos con sus manos.

Yo me estaba rompiendo por dentro, sentí que me ahogaba, sin embargo, seguí adelante.

Aunque le dije que no se acercara, lo hizo de igual forma, tomo mis brazos con sus fuertes manos, y me volvió a preguntar, ¿Qué sucede?, trate de zafarme pero me encontraba débil.

En ese momento, entró mi tía Rose, y la escena que vio no le gustó, en dos segundos, estuvo a mi lado, y empujo a Jake hacia la pared.

-No tía por favor no es necesario- le rogué.

Jacob estaba perdiendo el control, estaba más que molesto, pero la expresión que  ganaba en su rostro era la incertidumbre.

-Tía dile que se valla, no quiero volver a verlo en mi vida, lo quiero lejos de mi- dije abrazando a Rosalie, y escondiendo mi rostro.

-¿Es eso lo que quieres?- dijo Jacob decepcionado, al menos podrías decírmelo mirándome a la cara.

-Ya escuchaste Jacob, vete- le dijo Rosalie.

-No lo haré, hasta que ella me lo diga mirándome a los ojos- dijo Jacob con sus ojos llenos de lagrimas y su voz temblorosa.

Levante la cabeza y se me cortaba el aliento al verlo así, pero ya no podía dar marcha atrás. Me separé de Rosalie, y me acerqué a él, me pare justo en frente de su rostro, que parecía estar en pleno otoño, deshojándose, mis piernas a duras penas me mantenían en pie.

Escúchame bien Jacob Black, porque no lo repetiré dos veces, “No quiero, volver a verte, nunca más, en mi vida, creo que  Seth, me ayudó a darme cuenta de que me estaba dejando llevar, solo por una “cuestión de lobos”,  el que tú te hayas imprimado de mí, no quiere decir que yo deba corresponderte, además tu rehiciste tu vida, y estabas feliz antes de que yo llegara, ahora tienes que hacer lo mismo, has de cuenta que jamás existí, y olvídate de lo que pasó entre nosotros, ya que al menos para mí no tuvo ninguna importancia, yo desapareceré y no volverás a saber de mi, los siento mucho. No sé en que estaba pensando”.

Jacob, se desplomó por dentro, sus lágrimas cayeron desde sus ojos, y por un minuto creí que inundaban mi corazón, cerró los ojos, levanto la cabeza con sus manos en la cintura, respiró profundamente, respondió.

No sé que estas tramando, y no quiero saberlo, pero si quieres jugar, lo haré, está bien, Renesmee Cullen, tu tampoco tendrás noticias mías, en tu vida me volverás a ver, y como tú dices esa “cuestión de lobos” tampoco dirige mi vida, pude rehacerla sin ningún problema, cuando te llevaron, y bastante bien, Vanessa logró llenar el espacio que tu dejaste, y además te mentí, si estuve con mi esposa, lo hice porque solo quería tener sexo contigo, ya sabes es “cuestión de lobos”, y tú eres mi imprimación, y no fue gran cosa, pero ten algo por seguro, cuando te arrepientas de lo que acabas de hacer, volverás, y lo más seguro es que me  encuentres, pero ya no estaré dispuesto a dar mi vida por ti. “Porque no merezco esto”

Me miró, por última vez y se fue, cerré la puerta tras él, me apoye en ella, y me deje caer al suelo, las lagrimas no lograban salir de mis ojos, cada una de las palabras que dijo, se repetían una y otra vez en mi cabeza, quería llorar, pero solo hasta que lo sentí salir de la cabaña y alejarse unos metros, pude hacerlo, Rose, estaba, mirándome fijamente, y no articulaba palabra alguna, hasta que mis lamentos comenzaron a oírse en toda la casa, lloré con desesperación, por momentos sentí que me iba a desmayar de tanto llorar.

-¿Me imagino que tienes una buena razón para hacer lo que hiciste, verdad?- pregunto Rosalie

Porque si no la tienes, debo decirte con todo respeto, que eres la persona más estúpida, que he visto en mi vida, Renesmee, el te ama con locura, tu lo oíste, estaba dispuesto a dar su vida por ti, ¿viste su mirada?, lo heriste, y de una forma macabra, tu sabes que él nunca ha sido santo de mi devoción, pero no se merecía esto que hiciste.

Además no tiene lógica, ambos estaban mintiendo, por favor, a mi no me has contado como fueron las cosas, pero sé que él se guardó, todo este tiempo, para estar contigo, y créeme que tengo fuentes que lo comprueban… y tú crees que si no lo amaras, habrías soñado con él, a pesar de que tu memoria había sido borrada, lo habrías defendido de esa forma delante de tu padre, te admiro, pero nada de eso vale la pena, si lo dejas ir, a menos que tengas un muy buen motivo.

-¿Renesmee me estás oyendo?-  comencé a oír a lo lejos, de pronto mi tía me sacudió, y me levantó, me llevó a la cama, y comenzó a llamar a Seth.

Seth entró, con una expresión de sorpresa en su rostro.

-¿Qué sucedió aquí?-preguntó arrugando su frente.

-Jacob, salió hecho una furia de la cabaña, casi me deja sin puerta, hace mucho que no lo veía así- aseguro Seth.

-Lo siento mucho Seth, sé que esto te está afectando más de lo que debería- le dije disculpándome.

-¿Pero qué sucedió?, yo solo los oí alzar la voz, tu llamando a tu tía, Jacob yéndose y luego solo tu llanto, que por lo demás es muy desgarrador, ¿Qué hiciste Nessie?- explícame por que no entiendo nada-

Seth te contaré que sucede pero antes debes prometer que no le dirás nada de esto  Jake, ¿está bien?, le dije estirando mi mano, en son de cerrar el trato estrechando su mano.

-Nessie por favor, tu sabes que puedes confiar en mí, habla de una vez- me dijo cruzándose de brazos.

De acuerdo, luego de irme de aquí, fui a casa de Charlie, para resumir mi padre llegó allá, discutimos por que leyó mis pensamientos, y se entero de que Jake y yo… bueno tu sabes, luego de eso, el recibió una llamada de Alice, ella le comentó que tuvo una visión de los Vulturis, específicamente Aro, Jane y Alec vendrían a Forks, yo sugerí que peleáramos, como se hizo anteriormente, pero la diferencia, es que ellos, no vienen a pelear con nosotros sino con Jacob y por lo tanto con la manada.

-¡¿Qué?!-  eso no es posible, ¿qué tenemos que ver nosotros?, me dijo Seth furioso.

Déjame terminar, ¿sí?, le dije.

-Bueno, continua-.

Mi padre, me dijo, que él no estaba dispuesto a apoyar a Jacob, que mi familia volvería a nuestra antigua casa, y fin del asunto, el está molesto por lo que se enteró, no quiere pelear junto a ustedes, yo había decidido quedarme hasta hace unos minutos, por lo tanto se da por hecho que los Vulturis, no darán pie atrás, y vendrían de cualquier forma, está claro que el problema soy yo, entonces… Seth me interrumpió.

-¡Espera un momento!, como que habías decidido quedarte hasta hace solo unos minutos, ¿te vas a ir?

-Déjame terminar por favor-, le rogué.

¡No, ya puedo adivinar  el resto de la historia!, te irás para proteger a Jacob, si tú te alejas, ellos no vendrán, y el podrá seguir con su vida. Como Jacob no te dejaría hacerlo, decidiste romperle el corazón para hacerlo más fácil, y ahora lloras como una Magdalena porque lo amas con tu vida y no puedes estar lejos de él, pero crees que es lo mejor. ¿O me equivoco?- me dijo sin siquiera respirar para hablar.

Rosalie y yo nos miramos, sorprendidas, ¿tan evidente era todo?

-Parece que este chico no es tan sonso como yo creí-, me dijo Rosalie.

-Nessie, soy tu mejor amigo, te conozco demasiado, además no hay que ser muy inteligente para sacar conclusiones, ¿no crees?- me dijo levantando una ceja.

-Eso lo explica todo entonces- dijo Rosalie-, sonriendo.

-Tía de verdad, que no es el momento para tus sarcasmos- le dije molesta.

-Lo siento, me pondré seria- dijo Rosalie.

Y, ahora, ¿Qué harás?- preguntó Seth sentándose a mi lado.

-Irme- ¿que mas puedo hacer?, les respondí.

-¿A dónde?, Edward no quiere que regreses, y sé que hablaba en serio, nunca lo había visto tan molesto- agregó Rosalie.

-Pues no tengo idea, pero tengo que irme pronto, mientras antes me valla, antes los Vulturis, desistirán de venir aquí. Tal vez deba ir a Volterra, a decirles que jamás volveré a verlo, y que viviré como una ermitaña escondida en alguna montaña, para que lo dejen en paz- dije sarcásticamente.

-¿Te has vuelto loca?, ni en broma se te ocurra decir eso, ellos solo sacarían provecho de la situación, te utilizarían para extorsionar  a tu padre y Alice para que se unan a ellos a cambio de tu libertad, si es que deciden mantenerte con vida- me dijo Rosalie.

-Tal vez, se conformarían conmigo, así tendrían la certeza de que jamás volveré a ver a Jacob y al mismo tiempo, sería como su trofeo y dejarían en paz a mi familia- les dije a sabiendas de cuál sería la opinión de Seth y Rosalie.

-Si te atreves a decir o pensar en eso nuevamente, iré con tu padre y Jacob a contarles tu estúpido plan-, me dijo Seth con un tono amenazante.

-No puedes hacer eso, lo prometiste Seth- dije poniéndome de pie.

-Pero yo no prometí nada Renesmee, así que deja de hablar estupideces, ¿quieres?- me dijo Rosalie, con su rostro lleno de preocupación.

-Seth, ve a traerle algo de comer a esta niña, antes de que siga delirando- musitó Rosalie.

Seth salió de la habitación, y regresó con una bandeja llena de comida, para alimentar un ejército diría yo.