Capítulo 14
Seth llego a la casa eufórico, por algún
extraño motivo, venia más alegre de lo normal.
-Hola, pensé
que no estarías, creí que irías de caza- dijo dándome un beso en la mejilla y abrazándome
con mucho entusiasmo.
-Hola, si, lo sé, pretendía ir más tarde, pero
sentía mucha sed, además así estaría aquí cuando tu llegaras- le dije
devolviendo el abrazo.
-¿Qué te
sucede?, ¿Cuál es el motivo de tanta alegría?- pregunte una vez que me liberó.
-Te traigo una
sorpresa- murmuró acercándose a mi oído.
¡Una sorpresa,
mmmm, conociéndote esto no me agradará, que locura pasa por tu cabeza ahora
Seth Clearwater! –exclamé.
-Me ofendes
Renesmee, ahora no se si enseñarte mi sorpresa-
-¡Por favor
Seth, ya estoy intrigada!-
-No puedo
decirte que no, mira- dijo agitando un sobre color rosa pálido, con letras
doradas en su mano.
-¿Qué es eso?-
le dije arrebatándoselo de la mano.
Fuera decía
“Para Seth Clearwater y Nadia Lutz”, rompí el sello y lo abrí, dentro decía lo
siguiente
“La familia
Clearwater tiene el agrado de invitarlos a la fiesta sorpresa con motivo de
celebración el cumpleaños de nuestra querida madre y tía Sue Clearwater.
A realizarse
el día 2 de agosto en la reservación (casa de Emily Young), a las 20:00 hrs.
Por favor
confirmar asistencia.
Te esperamos
Saludos “
Mire a Seth un
instante tratando de organizar mis ideas.
-No me mires
así, no aceptare un no por respuesta- alego seriamente Seth.
-Por supuesto
que no iré, se que quiero superar mi relación con Jacob pero, pero verlo con su
esposa en una fiesta, no es la mejor forma de hacerlo-
-Sé que es
difícil, pero debes enfrentarlo de una vez por todas Renesmee-
-Tal vez
tengas razón, pero no estoy preparada para hacerlo ahora- me defendí y devolví
el sobre a sus manos.
-Todavía falta
un mes para la fiesta, al menos dime que lo pensaras- he hizo un puchero con su
boca.
-Está bien lo
pensare- dije blanqueando los ojos y riéndome un poco.
1 mes después
Había llegado
el día, desperté con un nudo en el estómago, no sé en qué momento Seth me
convenció de esta locura, asistir como su pareja a la fiesta de su madre, donde
el mayor problema no sería si los Vulturi se enteran de que estuve en contacto
con los humanos, si no enfrentarme a Jacob y su esposa. Tengo que estar demente
para hacer esta locura, o debo extrañarlo demasiado como para arriesgarme de
esta forma solo para verlo, además de masoquista por que verlo con Vanessa no
será nada agradable.
Dos semanas
antes del evento, Seth y Leah me acompañaron a escoger un vestido es Port
Angels, la verdad no sé qué hacia Leah conmigo y con Seth, ella me detesta, sin
embargo Seth insistió en que fuéramos juntos. Compre lo mejor que pude
encontrar en esta pequeña ciudad, no podía desentonar en esta fiesta, además
quiero que Jacob me vea bien, que no piense que estoy derrotada.
El vestido se
encontraba en el diván de la pieza de mi padre, junto a los zapatos y el bolso
de fiesta que Seth me obligo a comprar y yo encontré tan innecesario. Seth
pasaría por mí a las 7:00 en punto, debía estar lista.
Toda esta
situación me hizo extrañar a una persona muy especial de mi familia, tía Alice,
ella siempre sabía qué hacer en estos casos, era una experta en moda y como
sacarse partido con poco.
Debía salir a
cazar, después de todo en esta fiesta habrían humanos, y yo no me he alimentado
muy bien, salí de casa y camine hacia el
interior del bosque, en busca de algún animal sabroso y no muy grande, mi
apetito no era el mejor, pero sentí la responsabilidad de hacerlo, por
protección de los demás.
Agudice mis
sentidos, en busca de olores y ruidos que me llevaran a mi presa, entonces
percibí el dulce olor de un oso, fui en su búsqueda, cuando lo halle, note que era joven, pero
fornido y aparentemente se veía indefenso, en este momento tendré que poner en
práctica lo que me enseño tío Emmett.
Sigilosamente
me acerque a mi presa, me encontraba indecisa, estaba un poco débil y si se resistía,
saldría lastimada, pero me arriesgue, y salte sobre él, dando justo en el
cuello, no tuvo tiempo de dar pelea, bebí cada gota de sangre hasta dejarlo
seco, me alegro tanto de poder alimentarme de comida humana también, me habría
vuelto una adicta a este líquido espeso, con sabor a oxido y a sal, que marcaba
la diferencia en mi vida, me hacía diferente, cuando me disponía a retirarme
del lugar, pude percibir un efluvio familiar, me puse de pie para poder ver en
qué dirección estaba, cuando oí una voz a mi espalda.
-Al parecer
tuviste un buen maestro- y oí esa risa inconfundible y tan característica en
él.
-¡Tío Emmett!-
grite y me lance es sus brazos.
El me tomo en
sus grandes y musculosos brazos y me dio unas vueltas en el aire.
-¿Qué estás
haciendo aquí?- pregunte una vez de pie en el suelo
-Digamos que
alguien insistió en que había una emergencia de la moda- respondió haciendo un
guiño con su ojo y mirando discretamente hacia mi derecha.
Mire
minuciosamente intentando encontrar a alguien, cuando los vi, los tres venían
calmadamente y mantenían una conversación, corrí a su encuentro, tía Alice, tía
Rosalie, tío Jasper también habían venido. En ese momento me di cuenta de
cuanto los extrañaba, hacían cuatro meses que no los veía, en ocasiones tía
Rosalie llamaba para saber mi estado de ánimo y si me estaba alimentando.
Primero salude a tía Alice, cuando sentí su abrazo, me quebré, recordé como
ella siempre intercedía por mí ante mi padre y como terminaba convenciéndolo de
dejarme hacer lo que yo quería, por muy enfadada que estuviera con mi
caprichoso y sobre protector padre, lo necesitaba más de lo que me convenía.
Los salude uno
por uno, cuando al fin llegamos al lado de tío Emmett.
-¿Papa y mama
también han venido? Pregunte mientras tía Alice secaba los restos de lágrimas
de mis ojos.
-Si Edward y
Bella han venido, extrañamente ella recibió una invitación a la fiesta de Sue-
dijo tía Rose abriendo sus brazos para darme un fuerte y confortante abrazo, de
pronto mi pena y angustia ya no estaban, claro,
tío Jasper estaba aquí.
-Tío Jasper,
ya sabes que no me gusta que controles mis emociones- le reclame con mis manos
en la cintura.
-Lo se mi
querida Renesmee, pero odio verte así- y acaricio mi pelo.
Debes
imaginarte porque estamos aquí, así que manos a la obra, hay que regresar a
casa rápido, tenemos mucho que hacer- dijo tía Alice tomando un mechón de mi
pelo con la punta de sus dedos, y poniendo una cara de horror ante ver mi
cabello en ese estado.
La idea de
tener a mi familia de vuelta en casa, aunque fuera por un corto periodo de
tiempo, me hacía muy feliz.
Una vez en
casa, tía Alice comenzó su ritual, masajes, pedicura, manicure, tratamientos
para todo, tantas cosas que creo para la hora de irme a la fiesta estaré
agotada.
-¿Mi madre no
vendrá a verme antes de la fiesta?- pregunte mirando a través del espejo.
Tía Rosalie
miro a tía Alice, era una mirada de complicidad, algo me escondían.
-No lo sabemos
Renesmee, tu madre no es la misma desde la última vez que estuvimos aquí.
-¿A que te
refieres tía Rose?
-A que…no
termino de hablar y tía Alice la interrumpió.
-No nos
preocupes ahora de eso, está bien, ya tendremos tiempo de hablar y aclarar
muchas cosas- dijo asintiendo con su cabeza y tomando el vestido para
enseñármelo.
-Esta lista-
menciono tía Rose mirando a Alice, esperando su aprobación.
-Perfecto- fue
lo único que salió de la boca de tía Alice.
El peinado era
sencillo, tía Rose recogió todo mi cabello en un moño rodeado por trenzas hechas
por el mismo, dejando unos mechones cayendo sobre mi cara, se parecía mucho al
que uso mi madre el día de su boda.
Mi vestido era
de satín negro, sencillo nada extravagante, pero a la vez muy llamativo, tal
vez muy llamativo, una vez listo el
vestido seguí con los zapatos y el maquillaje, al cabo de unas horas desde que
todo inicio ya me encontraba lista para cuando Seth pasara por mí.
Los nervios
afloraban en mi piel, que diría Jacob cuando me viera así, de pronto reaccione,
me di cuenta que era lo que menos importaba, olvídate de Jacob, repetía una y
otra vez en mi cabeza, venia bajando las escaleras, cuando Seth se estaciono
fuera de la casa en un carro blanco, los 4 vampiros al final de la escalera, se
quedaron en silencio y no me dirigieron la palabra mientras yo bajaba.
Seth metió la
llave en la cerradura y abrió la puerta principal, tío Jasper y Emmett lo
fulminaron con la mirada, Seth solo se dio cuenta de su presencia , una vez
dentro de la casa y conforme había cerrado la puerta, al dar la vuelta se
encontró con mi familia de frente, se quedó paralizado en su lugar.
Tartamudeo al
saludar.
-Ho-ho hola!-
se encontraba muy nervioso.
-Hola- lo
saludaron todos a coro, menos tía Rose, que se volvió hacia mí y levanto ambas
cejas, yo sabía cuál era su problema, Seth tenía llaves de la casa, eso le
molesto a tía Rose.
-¿Estas lista
hermosa?- balbuceo y me dirigió una mirada, que conociendo a Seth, me quería
comer a besos.
Desde el
primer día en que yo le regale un beso, y jugamos a las guerritas con harina y
huevo, Seth tiene más seguridad en sí mismo y constantemente me arranca uno que
otro beso, no mentiré, los correspondo, más en esos momentos me vienen las
imágenes del horrible sueño que tuve en el que Jacob nos encontraba teniendo
sexo y me impedía disfrutar.
-Si- dije
bajando los últimos peldaños, Seth se acercó y me ofreció su mano en ayuda.
-No faltaba más-
agrego tía Rosalie – ahora este perro corteja a Renesmee.
-¡Tía Rose no
seas así!- le exigí.
-Ya hablamos
de esto en casa, ¿verdad?, todo cae por su propio peso- dijo mirando a Seth.
-¡Pueden para
ya!, Seth vámonos- le dije tomándolo de la mano.
-¡Este asunto
no es de su incumbencia les quedó claro, es mi decisión!- les grite molesta.
Abrí la
puerta, y le pedí a Seth que saliera primero, antes de salir yo, me quede observando
a mis tíos, y le dije, - los amo pero no se conviertan en mis padres ok- y cerré
la puerta.
Antes de
cerrarla por completo, tía Rose me pregunto a qué hora regresaba.
-Renesmee, ¿a
qué hora regresas?- dijo cruzándose de brazos.
Yo sonreí y le
dije- ya no soy una niña- y cerré por completo la puerta.
Mientras me
dirigía al auto oí a tío Emmett diciendo que si el hubiese sido mi padre, no
habría salido con ese vestido, que era demasiado provocativo a lo que tía Alice
respondió que dejaran de creerse mis padres, que me bastaba y sobraba con mis
padres de verdad.
Seth abrió la
puerta del auto muy caballerosamente, subí en el, y cerro la puerta tras de mí.
Una vez dentro del auto, Seth inicio la conversación o más bien el
interrogatorio.
-¿Cuándo
llegaron?, ¿Anoche o esta mañana?- pregunto con un tono de preocupación en su
voz.
-Esta mañana
me sorprendieron mientras cazaba- respondí.
-¿Se quedaran
muchos días?- pregunto sin quitar la vista del camino.
-Seth son mi
familia, tienen que aceptarse de ambas partes- dije mirando hacia fuera por la
ventanilla.
-Eso lo tengo
claro mi Renesmee, es solo que, mientras ellos estén aquí, no podre pasar tanto
tiempo contigo-
Le sonreí y
acaricie su brazo – no te preocupes, solo se quedaran un mes como mucho, tal vez
dos- agregue.
-¡¿Qué?, ¿un
mes?!- exclamo Seth.
Me reí a
carcajadas por su reacción.
-Solo bromeo,
no creo que se queden un mes, tal vez una semana o dos, solo querían saber cómo
estoy y tía Alice quería ayudarme con lo de la fiesta, además mi madre también
esta invitada- le dije.
-¿Bella está
aquí también?- pregunto y al instante dijo, eso quiere decir que tu padre
también, ¡demonios!- exclamo.
-No debería sorprenderte,
¿Leah no te dijo que la invitarían?- pregunte.
-Bueno creo
que Leah olvido mencionarlo pero no es Bella la que me preocupa, es tu padre-
dijo acomodándose la corbata con una mano.
-¿Estas
nerviosa?- pregunto.
-Solo un poco-
dije ignorando el temblor de mis manos.
-Que bueno,
por que yo si, y ahora aun mas- agrego- ahora además de tener que cuidarte de
Jacob y todos los babosos de la fiesta, tendré que lidiar con tu madre y tu
padre, te imaginas que pasara si Edward lee mi mente, me mataría- me aseguro.
-¿Por que
estas tan seguro?- pregunte inocentemente
-No juegues
conmigo Renesmee, sabes y conoces mis pensamientos y sentimientos por ti, que
crees que pensara tu padre cuando lea mi mente y sepa que te deseo y quiero
hacerte el amor todos los días y a cada instante- respondió.
Me ruborice,
Seth jamás me había dicho eso tan directamente.
-Lo siento,
soy un idiota- y golpeo el volante del auto.
El silencio
reino hasta que llegamos a la reservación el camino se hizo eterno, pero al
mirar la hora solo habían transcurrido 25 minutos.
Seth se bajo
primero y corrió a abrirme la puerta, me baje y observe el lugar, o mas bien lo
olfatie , su hedor era inconfundible, Jacob ya estaba aquí.
-Renesmee,
intentemos pasarla bien, si quieres irte o te sientes incomoda, me lo haces
saber, ahora te diré algo, Vanessa esta recepcionando a la gente en la entrada,
así que toma aire y relájate- dijo Seth rápidamente.
No pude evitar
mirar en su dirección, a allí estaba, tan perfecta como la primera vez que la
vi.
-¿Por qué no
está Leah recepcionando a la gente?- pregunte a Seth.
-Leah se ha
encargado de mantener todo el día a mi madre ocupada para que no se diera
cuenta de la fiesta- respondió.
Seth me
ofreció su brazo para caminar al interior de la casa de Emily. Todas las
miradas estaban puestas en nosotros, me sentí muy incomoda, a medida que
avanzábamos, sentía que mi estomago se revolvía mas, creí que vomitaría.
Cuando casi
estábamos en la puerta Vanessa exclamo.
¡Seth, la
trajiste!, pensé que no vendrías! Dijo en un tono extraño.
Me dio un beso
en la mejilla, y pude notar como me observo de pies a cabeza.
-Me alegra que
estés aquí- dijo y supe que algo no andaba bien.
-¿Por qué te
sorprende tanto?, no tengo motivos por los cuales no venir- le respondí.
-No pensé que
te atrevieras a venir, por que de echo no te he visto desde que estuvieron en
mi casa, pensé que no eras una chica de salir mucho, solo eso-
-Por el
contrario, tengo motivos de sobra para estar aquí- dije molesta, se que me esta
tratando de decir algo.
-Y no sabes
cuanto me alegro de que estés aquí- y me mato con la mirada.
Una vez
dentro, me dedique a observar todo, perfecto era lo único que describir el
lugar, los adornos, los detalles, todo era precioso.
-¿Qué fue
eso?- pregunto Seth.
-Algo no anda
bien, lo presiento- le dije- creo que deberíamos irnos.
-¿A que te
refieres?- continuo Seth
-Creo que
Vanessa sospecha quien soy en verdad.
-Eso es
imposible- dijo tratando de calmarme
-Ademas Jacob
ya esta aquí y muy cerca-dije agachando la mirada.
Seth tomo mi
cara entre sus manos y me dijo- Renesmee el no se atreverá a acercarse, no
levantará sospechas en Vanessa- y me dio un abrazo.
El olor se
hacia a cada momento mas intenso, estaba cerca. Una garzona se nos acerco y
ofreció unas copas con champagne, tome mi primer sorbo y mire a Seth, el me
devolvió la mirada y lo vi en sus ojos, Jacob venia hacia nosotros.
-¡Buenas
noches!- fue lo que oí y basto para echar abajo estos 4 meses de avance que
había logrado tener, mi piel se erizo y mi estomago casi me traiciona
haciéndome devolver lo poco que bebí, y casi dejo caer mi copa.
Me di la
vuelta y allí estaba de pie junto a mi, tan jodidamente perfecto, llevaba un
esmoquin negro, que lo hacia ver malditamente sexy y varonil, lo recorrí con la
mirada en dos segundos, sus ojos, su cabello, sus labios y justo me detuve allí
en sus labios, podría jurar que se me hizo agua la boca, con solo mirarlos,
debes mantener la calma, me decía a mi misma.
-Buenas
noches- dijo Seth, tomándome de la cintura y acercándome hacia el.
Jacob hizo una
risa burlona y puso los ojos blancos.
-No me
provoques Seth, soy tolerante pero tengo mis limites- respondió casi gruñéndole.
-¿No me
saludaras?- pregunto mirándome fijamente
a los ojos.
-Buenas
noches- dije y mi voz casi no se oyó.
-Por qué tan
fría- dijo y se acercó y me beso en la mejilla, yo creí que me moriría ahí
mismo.
-También tengo
mis limites- le advirtió Seth.
-¿Qué?, ¿Ahora
eres su dueño?- le pregunto bebiendo toda la champagne de su copa.
-Ya basta, son
unos idiotas, yo no soy propiedad de nadie- les dije furiosa.
-Al parecer
Seth no piensa lo mismo- hablo Jacob cogiendo una copa de la bandeja que traía
la garzona.
-Yo solo vengo
a advertirles que Vanessa ya sabe quien eres Renesmee, no tengo la mas mínima
idea de como se entero, pero lo sabe y se que esta tramando algo-
-Y ahora nos
lo adviertes- le reclamo Seth.
-No me puedes
culpar por querer ver a Nessie- respondió Jacob mirándome tiernamente.
-Te lo dije,
sabia que algo no andaba bien- musite mirando a Seth.
-¿Qué te dijo
algo?- Pregunto Jake.
-Nada especial
, solo note un tono irónico en su voz, cuando dijo alegrarse de verme- dije
respondiendo a su duda.
-¡Seth
larguémonos de aquí, por favor!- le suplique.
- Amor,
esperemos que llegue mi madre, la saludamos y nos largamos de este sitio- dijo
acariciando mi mejilla.
Lo miré
extrañada, Seth jamas me había llamado “amor”, de seguro quería hacer enfadar a
Jacob.
-¿Amor?-
pregunto Jacob.
-Deja de
meterte en nuestros asuntos- respondió Seth muy alterado. Mas Jacob hizo caso omiso
de sus advertencias
-Acaso ustedes
dos, … ya saben, están juntos, son pareja- decía apuntándonos con su dedo
índice a ambos.
-Eso no es de
tu incumbencia, tu eres un hombre
casado- dije acercándome un poco para que nadie me oyera.
Sin previo
aviso me tomo por la cintura, me apretó contra el y me susurro al oído.
“Tu eres mía,
y te guste o no, jamás nunca nadie te pondrá un dedo encima, así tenga que
matar, nadie tomara lo que me pertenece por derecho Nessie “
La idea de que
Jacob me estuviera reclamando como suya y de su propiedad, era una idea
absurdamente excitante , pero triste al mismo tiempo.
No tuve tiempo
de reaccionar hasta que lo vi darle un empujón a Seth, entonces apareció mi
salvación.
-¿Chicos que
sucede?- no cabía duda que era la voz de mi madre.